Moh: “Desde los servicios sanitarios se puede desempeñar un papel crucial para ayudar a las mujeres que sufren violencia”

“Desde los servicios sanitarios se puede desempeñar un papel crucial para ayudar a las mujeres que sufren violencia, ya que la mayoría de ellas requieren estos servicios en algún momento de su vida, a raíz de sufrir malos tratos”, ha dicho esta tarde la Delegada del Gobierno, Sabrina Moh, en el transcurso de la inauguración de las Jornadas sobre violencia de género y atención sanitaria que tienen lugar en el Campus melillense de la Universidad de Granada (UGR).

Organizadas por la Unidad Contra la Violencia de Género de Delegación y el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, han arrancado con la presencia también del responsable territorial del INGESA, Omar Haouari, de la Unidad gubernativa, Laura Segura, y de la Consejera de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad, Elena Fernández Treviño.

“La consulta de Atención Primaria posibilita el establecimiento de relaciones de confianza que ayudan a la mujer a reconocer y afrontar su situación”, ha señalado en su intervención Sabrina Moh, quien ha insistido en que las consultas médicas posibilitan que los profesionales de la salud puedan identificar las necesidades de las víctimas, las de sus hijos o hijas y los recursos a los que pueden ser derivadas para una verdadera atención integral.

En su intervención, la Delegada ha apuntado también que la violencia de género es un problema que ocasiona graves problemas de salud física, psíquica, sexual y reproductiva para la mujer, que también afecta a la salud y el bienestar de sus hijos, hijas y personas a su cargo.

Por su parte, el Director Territorial del Ingesa, Omar Haouari, ha reconocido que, en ocasiones, es difícil detectar los malos tratos “porque en su fase inicial no dejan señales físicas visibles” y ha insistido en que “en ese momento del proceso, si el personal sanitario está debidamente formado y sensibilizado, su papel es crucial para identificar otros síntomas que pueden señalar una violencia escondida”.

La responsable de la Unidad de Violencia de Género de Delegación, Laura Segura, ha subrayado que los profesionales de la salud son un “elemento clave” en la cadena de la violencia por su capacidad de detección y porque “todas las mujeres y todos los menores pasan, en un momento de su vida, por un espacio sanitario”.

Por último, el Profesor Titular de Medicina Legal en la Universidad de Granada y ex Delegado del Gobierno para la Violencia de Género, Miguel Lorente, ha insistido en que, cuando una mujer sufre violencia, “lo que sufre es un problema de salud” y ha explicado que generalmente la violencia se asocia a la agresión y la agresión a la lesión, sin embargo la Organización Mundial de la Salud recoge que las mujeres sufren un deterioro de su salud física y psicológica progresivo. “Van entrando en un deterioro consecuencia del estrés crónico, de las situaciones de tensión, de ansiedad, de depresión… que se genera alrededor de la violencia”, ha señalado.