La Diócesis de Málaga, indignada por la gestión de la reducción de la jornada de los proofesores de religión

La delegada de Enseñanza de la Diócesis de Málaga, a la que pertenece Melilla, destaca sentimientos como la tristeza, la indignación, y sensación de «ninguneo» entre los profesores de religión, que el 5 de septiembre, tres días después de reincorporarse a su trabajo tras el verano, se enteraron de que el Ministerio de Educación reduciría sus jornadas drásticamente. Carmen Velasco cree que se incumple el Estatuto de los Trabajadores y rechaza las formas del Gobierno, que en julio le remitió las instrucciones habituales para las contrataciones de profesores en Andalucía, pero sin contemplar Melilla. Ante la reclamación que le hizo la Diócesis, Educación envió el paquete de horas de la ciudad, eso sí, sin firmar, algo a lo que la administración restó importancia al enviarlo, pero que luego para la Dirección Provincial ha sido motivo de no aplicación de las jornadas establecidas. La sucesión de los hechos es lo que lleva a Velasco a calificar el asunto como una tomadura de pelo.